A casi un mes de la entrada en vigor del protocolo hospitalario implementado por el Gobierno dominicano para regular la atención médica a ciudadanos extranjeros, la presencia de pacientes haitianos en los hospitales del Gran Santo Domingo ha disminuido de forma notable, especialmente en las maternidades, donde históricamente se registraban altos niveles de demanda por parte de esta población.
Durante un recorrido realizado por Diario Libre en centros clave como la Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia, el Hospital Materno Infantil San Lorenzo de Los Mina y el Hospital Marcelino Vélez Santana, se pudo constatar que la asistencia de nacionales haitianos, en especial mujeres embarazadas, es ahora casi nula. Personal médico, de seguridad, administrativo y pacientes coincidieron en señalar que el panorama ha cambiado drásticamente desde la aplicación de la medida.
Nuevo protocolo, nueva realidad
El protocolo, anunciado a finales de abril por el Ministerio de Salud Pública, establece que los centros de salud deben verificar el estatus migratorio de los pacientes extranjeros antes de ofrecer atención no urgente. Aunque se garantiza la atención en casos de emergencia, muchas mujeres haitianas, temerosas de ser detenidas o deportadas, han dejado de acudir a consultas prenatales o partos programados.
“Antes veíamos entre 10 y 15 pacientes haitianas por día solo en consultas prenatales. Ahora, si llega una, es mucho”, aseguró una doctora del área de obstetricia de la Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia, quien prefirió no ser identificada.
En la Maternidad de Los Mina, una enfermera explicó que en la última semana solo han recibido a dos parturientas de nacionalidad haitiana, cuando en meses anteriores esa cifra podía alcanzar hasta 20 en una jornada.
En el Hospital Moscoso Puello, los agentes de seguridad asentían con asombro cuando se les hablaba de los extranjeros. “Aquí hace mucho que no vienen haitianos”, indicó un portero.
Temor, desinformación y desprotección
La reducción no parece deberse exclusivamente a un descenso real en la cantidad de personas que necesitan atención, sino al miedo. Mujeres haitianas consultadas durante este mes del protocolo han expresado su temor a ser interceptadas por autoridades migratorias al acudir a centros de salud.
Organizaciones defensoras de los derechos humanos han advertido que la implementación del protocolo podría estar vulnerando el derecho a la salud, especialmente en el caso de mujeres embarazadas y niños recién nacidos.
Reacción oficial
El Ministerio de Salud ha defendido la medida como parte de un esfuerzo para ordenar la presión que enfrenta el sistema hospitalario público, señalando que no se negará atención en casos de urgencia. Sin embargo, no se han ofrecido estadísticas oficiales actualizadas sobre el número de pacientes haitianos atendidos antes y después de la entrada en vigor del protocolo.
El Servicio Nacional de Salud (SNS) ha reiterado que “todo paciente que llegue en estado de emergencia será atendido, sin importar su nacionalidad o estatus migratorio”, pero ha insistido en la necesidad de “racionalizar recursos y evitar abusos del sistema”.
En cifras
Según datos del SNS, hasta mediados de 2024, más del 30 % de los partos en hospitales públicos eran de mujeres extranjeras, en su mayoría haitianas. Las autoridades aseguran que este porcentaje ha disminuido, pero los datos oficiales aún no han sido publicados.
Mario Lama dijo en un reporte ofrecido por Diario Libre en 2024 que el Gobierno de la República Dominicana invierte cada año entre 10,000 y 15,000 millones de pesos en atención en hospitales a pacientes adultos y pediátricos de origen haitiano.
“El gasto en asistencia a extranjeros haitianos, no solo a las parturientas, sino a los que van a los hospitales a consulta, a internamiento, a cirugía, a laboratorio, a imágenes, ronda entre 10,000 y 15,000 millones de pesos por año”, declaró.
La reducción visible de pacientes haitianos en los hospitales dominicanos refleja el impacto inmediato del nuevo protocolo hospitalario. Sin embargo, las consecuencias humanas y sanitarias de esta medida aún están por verse.
Fuente:
diariolibre.com