Por Jose Diaz 
El virus sincitial respiratorio es el responsable de la mayoría de los casos de bronquiolitis en lactantes y cuadros gripales que pueden tornarse complicados en adultos mayores, de acuerdo a especialistas consultados.
Esto se debe a que este virus afecta las vías aéreas bajas, provocando una inflamación de los bronquiolos (algunas de las vías respiratorias más pequeñas en los pulmones), dificultando la respiración, limitando el intercambio gaseoso de oxígeno y, por ende, limitando la oxigenación de los órganos para que puedan cumplir con sus funciones corporales.
“El virus sincitial respiratorio es muy frecuente. En general, tiene una circulación estacional, está muy relacionado con el frío y la humedad, pero en países tropicales puede estar todo el año circulando”, aclaró el pediatra Gonzalo Pérez Marc en conversación con este medio.
“Genera una carga de enfermedad muy grande. Es la principal causa de morbimortalidad por afección respiratoria en los menores de edad. Es una de las principales causas de neumonía a nivel pediátrico con más de 100,000 muertes por año a nivel mundial de virus sincitial respiratorio y más de 35 millones de hospitalizaciones, el 96 % de ellas se dan en países de bajos recursos”, agregó el especialista.
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Igualmente, se estima que por cada niño hospitalizado por virus sincitial, en la comunidad se quedaron dos o tres que no acudieron a un centro de salud en búsqueda de asistencia.
¿Hay vacuna para este virus tan frecuente?
Ante la pregunta de por qué si es un virus tan común, la comunidad científica no había desarrollado más esfuerzos en lograr una vacuna, Pérez Marc aseguró que desde los años 60 se iniciaron los estudios para lograr el biológico, pero, el camino para lograr un simulador muy bueno de la proteína del virus no fue fácil.
“Uno lo que quiere es con una vacuna se genere una respuesta inmunológica contra un determinado virus, bacteria, lo que fuera, contra un determinado patógeno, pero sin enfermar a la persona, cosa que la persona cuando se ponga en contacto con ese patógeno, tenga ya toda la respuesta inmunológica montada para dar cuenta de ese patógeno, quizás no evitar infectarse, pero sí evitar enfermarse gravemente”, detalló.
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“Fue muy difícil encontrar una parte del virus que cuando uno la transformara en vacuna realmente genera una respuesta inmunológica que después reconociera fácilmente al virus y evitar a la enfermedad severa”, confesó.
En los últimos seis años se logró imitar a la proteína F del virus influenza respiratorio en su forma de prefusión y conseguir una muy buena respuesta inmunológica en cuanto a inmunidad de memoria y sobre todo producción de anticuerpos neutralizantes.
Proteger desde el embarazo
El estudio incluyó, además de adultos mayores, a mujeres embarazadas con la idea de proteger a los bebés recién nacidos a partir del pasaje por vía de la placenta de esos anticuerpos neutralizantes que se generan en la vacunación materna dentro de la mamá, cuestión de que los bebés nacieran ya desde el minuto cero protegidos, y posteriormente, por vía de la lactancia.
Pérez Marc participó en como investigador principal en el estudio Berni, diseñado por iTrials-Equipo Ciencia, el Centro de Innovación y Equidad en Políticas de Salud de la Universidad de San Martín (en Argentina) y Pfizer.
Este estudio, realizado en su país natal, Argentina, donde se vacunaron a más de 7,000 embarazadas con Abryzbo, una vacuna bivalente de una sola dosis contra virus inicial respiratorio, que demostró tener una eficacia mayor al 82 % para prevenir la enfermedad pulmonar severa por virus influenza respiratorio hasta los tres meses de edad y del 70 % hasta los seis meses del bebé.
Desde 2023, esta vacuna fue aprobada por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) y en territorio dominicano está disponible solamente a nivel privado.
Un dato curioso es que Argentina fue el primer país del mundo en incluir esta vacuna aprobada dentro de su calendario nacional de vacunación para aplicarse a todas las mamás que estuviesen embarazadas entre la semana 32 y 36.
De acuerdo con el también docente en la Universidad de Buenos Aires (UBA), durante las dos primeras campañas de vacunación se han inoculado más de 1.5 millones de embarazadas combinando las estadísticas de Argentina, Estados Unidos e Inglaterra, sin que se hayan desatado alarmas de seguridad por el componente biológico.
Fuente:
diariolibre.com