El musical de Broadway «Hello, Dolly!» debutó este viernes con éxito en la sala Carlos Piantini del Teatro Nacional Eduardo Brito y continúa con funciones hasta el domingo 20 de julio.
La producción artística, dirigida por Carlos Espinal y producida por Marcos Malespín, retrata la cambiante ciudad de Nueva York de finales del siglo XIX, una sociedad que se preparaba para entrar al siglo XX con nuevos cambios sociales, donde la mujer poco a poco podía permitirse soñar, emprender y conseguir el éxito más allá del casamiento.
En ese trajín, la polifacética artista dominicana Cecilia García se adueña por completo del escenario contando, a través de movidas canciones y precisos diálogos, como pensaba ese Nueva York de los años 1800 y tantos.
Ella y el showman, Carlos Alfredo Fatule, como Horace Vandergelder, quienes actuaron juntos por primera vez, fueron la veteranía, profesionalidad y química perfecta, manteniendo el protagonismo e hilo conductor hasta el final.
El musical comenzó a las 8:50 de la noche del viernes 18 ante una escenografía que mostraba los edificios de la ciudad que subía con rascacielos, en la que la gente viajaba en tren y se reunía en las presentaciones sociales donde las damas y los caballeros asistían a encuentros guiados de los familiares y casamenteras para concretar el matrimonio.
Al mismo tiempo, vemos una zona más rural, Yonkers, dónde reside el millonario Horace Vandergelder (Carlos Alfredo Fatule), un viudo que busca esposa para que sea su compañera y ayudante del hogar.
Aunque la trama de «Hello, Dolly!» no va con el mundo de hoy, la pieza que mira esa época del pasado es colorida, la orquesta en vivo dirigida por el maestro Dante Cucurullo dio un aire de teatro en vivo y el elenco y las coreografías fueron cautivantes.
Los vestuarios, las sombrillas y los sombreros juegan un rol distintivo en las mujeres, y el traje elegante marca la personalidad y el estatus social en los hombres para poder pretender. Las parejas, en los números musicales, estuvieron sincronizados.
En el espectáculo teatral se interpretaron las canciones «Put On Your Sunday Clothes», «Before the Parade Passes By» y el emblemático tema «Hello, Dolly!».
La versión dominicana respetó la dramaturgia. Sin embargo, resulta ser muy extensa, con intermedio luego de una hora y minutos de función y por momentos no hay variaciones en la historia.
Los personajes
Completan el elenco Javier Grullón, Laura Rivera, Luz García, Carolina Jiménez, Roger Manzano, Axel Mansilla, Paula Ferry y Miguel Lendor (Papachín).
Javier Grullón realiza el papel de Cornelius Hackl, el soñador y entusiasta empleado de Vandergelder.
Laura Rivera hace el rol de Irene Molloy, la refinada y encantadora sombrerera, y siempre deja en alto su calidad vocal en las canciones para musicales.
Luz García sorprende en el divertido y excéntrico papel de Ernestina Money.
Carolina Jiménez, como Minnie Fay, la joven aprendiz de sombrerera, chispeante y llena de vitalidad.
Roger Manzano, como Ambrose Kemper, quien se caracteriza por ser soñador, romántico y está decidido a luchar por el amor de su vida.
- Axel Mansilla, interpreta a Barnaby Tucker, el simpático y leal compañero de Cornelius.
- Paula Ferry, como Ermengarda, la soñadora y rebelde hija de Vandergelder.
- Miguel Lendor (Papachín), interpreta, con su humor y veteranía, al extravagante Rodolfo Reisenweber.
Sinopsis
Ambientada en la ciudad de Nueva York de finales del siglo XIX, «Hello, Dolly!» sigue las divertidas y encantadoras peripecias de Dolly Gallagher Levi (Cecilia García), una viuda ingeniosa y carismática que trabaja como casamentera profesional.
Contratada para encontrarle esposa al rico y malhumorado comerciante Horace Vandergelder (Carlos Alfredo Fatule), Dolly tiene en realidad un máster plan: casarse con él.
En su camino, entre enredos, confusiones amorosas y situaciones cómicas, Dolly también ayuda a otros personajes a encontrar el amor y a redescubrir la alegría de vivir.
Esta obra ha cautivado a generaciones desde su estreno en Broadway en1964 y luego en la película protagonizada por Barbra Streisand en la que realiza un homenaje al amor, a la espontaneidad y las segundas oportunidades.
Fuente:
diariolibre.com