Lo empacaron como si fuera marisco, pero el olor a cocaína terminó delatando la carga. Agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), junto al Cuerpo Especializado de Seguridad Aeroportuaria (CESAC) e inspectores de Aduanas (DGA), confiscaron 58 kilogramos de cocaína camuflados dentro de cajas de pescado en el Aeropuerto Internacional del Cibao, en Santiago.
La droga, distribuida en igual número de paquetes, estaba escondida en un doble fondo adherido a las tapas de cada caja de pescado, según confirmaron las autoridades tras una verificación más exhaustiva ordenada por el Ministerio Público.
Los narcóticos fueron detectados inicialmente por una máquina de rayos X, durante una inspección rutinaria en uno de los depósitos de carga de la terminal aérea.
Las cajas estaban listas para ser embarcadas con destino a Miami, Estados Unidos, a nombre de una compañía ubicada en la carretera Navarrete–Puerto Plata. El análisis del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) determinó que el peso total del alijo era de 58.02 kilogramos de cocaína.
El conductor del camión que transportó la mercancía al aeropuerto fue detenido y permanece bajo investigación. Hasta el momento, las autoridades no han revelado su identidad ni si se han identificado otros implicados en la operación.
Buscan la red responsable
La DNCD y el Ministerio Público señalaron que continúan las indagatorias para establecer la red responsable del frustrado envío, al tiempo que advirtieron que se mantienen en alerta ante el uso de métodos cada vez más sofisticados para intentar burlar los controles en puertos y aeropuertos del país.
“El narcotráfico internacional sigue buscando maneras de contaminar rutas legales con mercancía aparentemente inofensiva, como alimentos y productos perecederos”, señaló una fuente vinculada al proceso de interdicción. “Pero los protocolos de inspección se están reforzando y cada hallazgo fortalece nuestras capacidades para detectar estas maniobras”.
Este intento de tráfico forma parte de una tendencia en la que productos de exportación como frutas, vegetales, electrodomésticos y ahora pescado, son utilizados como fachada para el transporte de sustancias controladas. En este caso, los paquetes estaban cuidadosamente prensados en forma de láminas, envueltos en fundas plásticas negras y escondidos dentro de un compartimento especialmente construido para evadir los controles.
Las autoridades dominicanas indicaron que se trata de una modalidad que ya ha sido detectada en otros operativos, tanto en aeropuertos como en puertos marítimos, y no descartan que se trate de una red con ramificaciones internacionales.
Mientras se profundizan las investigaciones, las agencias de seguridad aseguran que seguirán fortaleciendo sus capacidades de inteligencia, tecnología de detección y coordinación interinstitucional para evitar que el país sea utilizado como plataforma para el tráfico de drogas hacia el exterior.
Fuente:
diariolibre.com